La puerta apilable Devery aprovecha el giro del motor
para impulsar el telón de lona en movimiento ascendente o descendente. La salida del reductor enlaza con el eje de accionamiento
de la puerta de forma directa o mediante una transmisión por cadena según convenga. Este eje cruza todo el conjunto superior de la
puerta y se mantiene estable mediante un conjunto de rodamientos ubicados dentro de unos soportes-brida que van fijados a la
estructura.
Con el eje giran de forma solidaria un conjunto de poleas que están unidas a unas correas que se dirigen de forma
vertical hacia la parte más baja de la puerta. Estas correas de poliester de alta resistencia al desgaste mecánico y la tracción van
guiadas dentro de unos enganches situados en las barras horizontales, los extremos de las cuales viajan dentro de las guías laterales.
Dichos extremos estan protegidos mediante tapones de caucho, que amortiguan el ruido del telón en su desplazamiento. Estas barras
montadas en bolsillos dentro de la lona se desplazan conjuntamente dentro de la lona de tal forma que barras y lona forman un cuerpo
solidario. La primera barra de la parte superior de la puerta es la encargada de unir la lona con el conjunto a través de unos cuelgues-soporte
ajustables que se atornillan al conjunto superior. En la segunda barra horizontal de la parte inferior de la puerta, se realiza la
cogida de las correas de arrastre y se fijan mediante unas hebillas.
Cuando el motor está rotando en sentido
ascendente, las poleas tiran de las correas, enrollandose en ellas y mueven la penúltima barra inferior hacia arriba de tal forma
que la colisión de esta con las que la preceden genera el movimiento de apertura de la puerta de abajo hacia arriba quedando el telón
recogido en forma de pliegues. En sentido inverso al desenrollarse las cintas, la lona cae por su propio peso, desplegandose, consiguiendose
así el cierre del telon. En la parte inferior de telón se dispone un perfil metálico con goma de amortiguación y banda de contacto.
Seguridad
activa y pasiva.
En el movimiento automático de la puerta se han tenido en cuenta las distancias de
seguridad para las personas y se han utilizado las protecciones necesarias cuando ha sido posible. Se ha comprobado la correcta instalación
de los dispositivos de protección contra los peligros de rotura, atrapamiento, aplastamiento, cortes, golpes, proyecciones, estallidos,
etc. en los elementos mecánicos (engranajes, correas, rodamientos, etc.). Dichas protecciones, son de un material sólido y resistente,
han quedado fijadas sólidamente en su lugar y no ocasionan peligros suplementarios o adicionales. Las protecciones y resguardos cubren
las proximidades de la puerta hasta una altura de 2,50 m, u otra altura según las particulares condiciones de la zona circundante.
Los distintos elementos accesibles de la puerta no presentan aristas, ángulos pronunciados, extremos afilados, relieves o salientes
ni superficies rugosas que puedan producir lesiones.
Los elementos de seguridad que automatizan la puerta
(fotocélulas, banda de contacto, etc.) y todos los otros elementos que constituyen la puerta están construidos con materiales conformes
y marcados CE.